Pero cuidado…

ana maria shua 13Pero cuidado: un error minúsculo al pronunciar las palabras secretas (el alargamiento de una vocal o una pausa indebida, el gesto inadvertido de rascarse una pierna) puede causar acontecimientos pavorosos. Como el crecimiento de dos orejas largas, colgantes y peludas en la silla más cómoda de la casa, en la que ya nadie se atreverá a sentarse. Como la brusca caída de los pantalones del hechicero neófito en presencia de cuatrocientos demonios y una amiga de su madre. O la completa destrucción del mundo.
Ana Maria Shua

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