2.304 – Cuando dentro de la ciudad de Gamud un hombre mata a otro…

antonio fernandez molina2  Cuando dentro de la ciudad de Gamud un hombre mata a otro, aunque sea en legítima defensa, ha de pagarlo con la vida. Únicamente puede salvarle una cosa. Si el muerto era casado, y el que lo mató no tiene inconveniente, vestir su ropa y acicalarse de modo que se le asemeje lo más posible, presentarse ante la mujer del difunto ataviado de esa manera y así conseguir hacerle comprender que en todo caso ella no perderá en el cambio. Si la mujer acepta, el hombre está salvado y desligado de anteriores compromisos. Su mujer, en ese caso, queda en la misma situación que si fuera soltera.
Así se han solucionado muchos conflictos de alcoba.

Antonio Fernández Molina
Las huellas del equilibrista. Ed. Menoscuarto 2005

huellas equilibrista

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