Una mujer arqueóloga encontró inesperadamente en su marido restos de un matrimonio anterior.Abbé Nozal
Una mujer arqueóloga encontró inesperadamente en su marido restos de un matrimonio anterior.Abbé Nozal
-¿Lo dejamos? -preguntó ella.
-¿Por qué? -inquirió él.
-No sé, parece que a ti no te hace ilusión la cosa.
-Bueno, la verdad es que me hacía más ilusión en otra época en la que tenía mas ganas de todo.
-Realmente tú nunca has tenido muchas ganas, lo que pasa es que yo te insistía, te insistía, y al final…
-No sé; yo no niego que fuera así. Los tiempos cambian y no son las mismas las necesidades de joven que de mayor.
-¿Sabes lo que en el fondo pasa? Que siempre lo mismo cansa.
-Tienes razón, aunque sea gloria bendita.
-Por eso mismo. Aunque nos guste mucho el jamón, un jamón entero para dos que somos parece demasiado.
-Lo dejamos entonces si te parece. Lo mismo si tardamos mucho en comerlo se reseca y tenemos que tirarlo.
-De acuerdo, compramos sólo cien gramos.
José Antonio Ayala
Abrió los ojos. (Había estado tirado en su butaca toda la mañana fea, durmiendo su largo, desesperado hastío.)Juan Ramón Jiménez
Teje incansablemente. De día teje, de noche espera. Cada día vuelve a tejer: obsesión o, como ahora se dice, terapia. No desteje tanto como lo afirma la tradición, aunque a veces lo hace y restituye con un nuevo tejido el hueco producido en la tela. Eso sí: resiste las tentaciones, y hasta las amenazas, de los que quieren alejarla del rincón en que la vida la ha colocado. Quiere seguir ahí, tejiendo y esperando: su vida gira alrededor de tejer su tela. No se ha enterado de que el estudiante en cuyo cuarto vive la ha bautizado Penélope. Tampoco sabe qué significa ser una araña.David Lagmanovich
A lo largo de los años cada tanto aparece en mi Outlook el mensaje de un misterioso admirador proponiendo encontrarnos tal día a tal hora en tal café a tomar un café. Me alegro y de inmediato acepto. Pero el siempre cancela en el último momento. A pesar de lo reiterado del juego, mientras la invitación titila, yo me pregunto, ilusionada: ¿será tórrido, fuerte, negro, dulce, con buena y espumante leche, estará cortado? Me refiero al café, naturalmente.Luisa Valenzuela
La madre es joven y guapa. Viene con las mejillas pintadas y los ojos barnizados como una puerta. Hoy es día de mercadillo.Pilar Galán
¿Donde se ocultan en invierno las mujeres de la primavera?
«Pude dar vida, luego me la puedo quitar. Que los mantenga su abuela»
Max Aub
Los pacientes atacados de naparanoia sienten la extraña sensación de que nadie los persigue, ni está tratando de hacerles daño. Esta situación se agrava a medida que creen percibir que nadie habla de ellos a sus espaldas, ni tiene intenciones ocultas. El paciente de naparanoia finalmente advierte que nadie se ocupa de él en lo más mínimo, momento en el cual no se vuelve a saber más nunca del paciente, porque ni siquiera puede lograr que su siquiatra le preste atención.
Luis Britto García
Intentó ser un conquistador imbatible, pero las mujeres se le reían en la cara. Entonces trató de hacer fortuna en la Bolsa, y vio esfumarse las últimas propiedades de la familia. Sucesivos deportes sólo le acarrearon derrotas humillantes. Recordó entonces que en la escuela escribía muy bien, con letra afilada y erguida, sobre cuadernos cuadriculados de blancura incandescente, y en una súbita iluminación descubrió su vocación: escritor. Después de todo, en la escuela de su pueblo le habían enseñado a leer y escribir.David Lagmanovich