3.008 – Renacimiento

Ruben Abella  Tras una Nochebuena de whisky y olvido, Zenón despertó en un pesebre lleno de paja, con la mejilla apoyada en el vientre de escayola del Niño Jesús. A un lado estaban San José y la mula. Al otro, la Virgen María y el buey.
Tiritando, doblegado por la resaca, Zenón bajó como pudo del pesebre, se abrió paso entre las familias que lo observaban perplejas y se escabulló murmurando:
-Tengo que dejar de beber.

Rubén Abella
Los ojos de los peces. Ed. Menoscuarto, 2010

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