3 comentarios en «1.649 – Gracias a la guerra…»

  1. Jaume Perich era un genio. Tiene otra cita, al menos siempre he oído que era de él, que dice:
    «A partir de diez millones de pesetas, las personas honradas se pueden contar con los dedos de una oreja».
    Saludos.

  2. Es un texto es demasiado denso, excesivamente largo. ¿Qué le costaba a Jaume q.e.p.d. suprimir ese adverbio redundante que suena a niño abandonado a las puertas de… «incluso»? ¿Y esa oración en perifrástica, «puede morir»? En presente de indicativo suena mejor aqueste mensaje en los dedos de mis orejas. De todas formas, con la censura avizor, don Jaume fue un tío cojonudo, que los tenía bien puestos y que nos alegró la transición a cuatro ilusos, ya peinamos canas la mayoría, que creíamos tener el paraíso al alcance de la mano. Lo que hemos logrado es agarrarnos rabiosamente a la vida para que no se nos vaya jamás. Sigo siendo un iluso. Moltes gracies, molt honorable Perich, o como se diga, que no soy catedrático de catalán, solo de castellanidades irresueltas. Bona nit.

Deja un comentario