La peste experta

millas23 Si usted es un padre consciente de la importancia de las nuevas tecnologías y ha decidido regalar a sus hijos por Navidades un ordenador, no se le ocurra consultar a un cuñado experto en el tema, o a un sobrino licenciado en Informática. Ni siquiera se deje aconsejar por el vendedor. Entre en la tienda con un gesto decidido, coja el que más rabia le dé, con tal de que pueda pagarlo, llévelo a casa, y que los niños se entiendan con él.
A primera vista, lo sensato sería hablar con el hermano de su mujer que trabaja en Sony, pero ése es el modo más seguro de que sus hijos se queden sin ordenador y usted hecho un lío. Las personas aficionadas a la informática son propensas a dar conferencias, de manera que en lugar de informarte te duermen. Lo malo es que después de haber soltado un rollo lleno de términos incomprensibles, te recomiendan que esperes, que no compres todavía, porque dentro de seis meses se van a caer los precios y el mismo ordenador que ahora te cuesta medio millón estará a cien mil. O te aseguran que dentro de quince días va a salir un modelo nuevo que además de modem y CD-Rom llevará incorporado una freidora. O te miran de arriba abajo, para ver si estás en tu sano juicio, y te preguntan que para qué quieres regalarle un ordenador al niño.
-Para que juegue con él y se familiarice- respondes acobardado.
-Pero hombre -dice tu cuñado conteniendo la ira-, eso es un disparate. Para los juegos es mejor que le compres un CDI. El futuro pasa por el CDI. Además, en ese aparato podréis ver también películas, porque los vídeos y las cintas de VHS son una antigualla.
-Pues el caso es que había pensado comprar un vídeo nuevo.
-Si lo que quieres es tirar el dinero, allá tú.
Al final el cuñado experto te da una información tan completa que no te compras nada porque cualquier cosa que hagas será un disparate. Yo he adquirido siempre los ordenadores en Nueva York porque no sé inglés y gracias a eso no entiendo los consejos del vendedor. Y la verdad es que hasta ahora me han dado muy buen resultado. Los entendidos son una peste.

J.J. Millás

Un comentario en «La peste experta»

Deja un comentario