3.656 – La carga de la Brigada Ligera

  «Lo que importa, muchachos, es el estilo», afirmó el capitán, montado en su blanco alazán. Los soldados escuchaban en silencio con la espada desenvainada, mientras los caballos, quizá presagiando el combate, piafaban nerviosos. «La muerte no importa», terminó diciendo el capitán y dicho esto gritó: » ¡ Compañía! ¡A la carga…!». En perfecta formación la caballería inició el ataque. Media hora más tarde en una extensión de veinte kilómetros, los cadáveres, tanto de soldados como de caballos, salpicaban el vasto campo de batalla. Toda la compañía había perecido. En tierra, los muertos componían bellas figuras. La mirada hacia adelante, el brazo erguido con la espada en alto, la chaqueta abotonada y el cuello de la guerrera perfectamente ajustado.

Alonso Ibarrola
No se puede decir impunemente ‘Te quiero’ en Venecia.Visión Libros. 2010
http://www.alonsoibarrola.com/

Deja un comentario