3.624 – Casualidad

  Ocurrió cuando me disponía a bajar en mi parada en el preciso momento en el que tú te ponías de pie, preparándote para la siguiente. Casi más que tocarnos fue intuirnos, pero toda mi atención se concentró en esa porción de mí que apenas si te rozó, y sentí inmen – samente definido ese trocito de tu carne. Y nos miramos un instante, o menos, antes de que yo bajara.
Los dos sabemos de sobra que fue casualidad. La misma que ahora buscamos a diario cuando paso cerca de ti, sin que haga falta, al tiempo que tú te levantas sin necesidad.

Miguelángel Flores
De lo que quise sin querer – Ed. Talentura – 2014

Deja un comentario