-¡Maldito Alzheimer! –gritó el abuelo desesperado.
-¿No quieres que siga leyendo? -preguntó la nieta mientras pasaba de página. El viejo fijó la vista en una atractiva enfermera.
-Abuelo, deja de mirar a las chicas. Escucha la historia: «Entonces me salpicó con el polvo mágico de sus alas. Jamás creceré, Wendy. Nunca me haré mayor…».
Antes de acabar el párrafo, los ronquidos del anciano ya resonaban en el pasillo del geriátrico.
-Voy a casa con la abuela. Me llevo tu diario -susurró la niña. Cogió el libro y salió volando por la ventana.
Un comentario en «2.873 – Amnesia»
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Como estoy leyendo los cuentos atrasados de las vacaciones, cuando he abierto el del día 28 y he visto tu foto, he pensado que te habías convertido en escritor!!!!!
En cualquier caso, gracias a ti por tantos cuentos, ya camino de los 3000
Un abrazo,
Blanca