3.389 – Conquista de la Nueva España IV

   -Mis cortesías, mis respetos -dice el conquistador, con grave sonrisa y reverencia.
-Mis escupitajos, mis insultos -traducen los lenguas, imitando su gesto.
Los mexicanos entienden perfectamente. Sonríen y devuelven los cumplidos. Besan la tierra con las manos y la boca, preparan secretamente las armas.
Los lenguaraces serán recompensados con justicia por el bando que resulte triunfador. ¿Acaso una traducción más literal habría evitado la guerra?

Ana María Shua
Cazadores de letras. Ed. Páginas de Espuma.2009